El único punto


Ven, vamos a arriesgarnos. No dejes que tu reflejo en el espejo te mire angustiado. Vamos a cosernos las heridas abiertas con punzadas de sueños... Que tus besos, en hilera, tracen figuras irreales entre mis lunares, que ya nos encargaremos de hacer realidad todos nuestros impulsos. Cúrame las ganas. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ya no estás