Monstruos
Los monstruos que se escondían debajo de nuestra cama cuando éramos niños, siguen ahí. Los llaman "Recuerdos", y se aprovechan de que todos, por la noche, estamos un poco más rotos, un poco más tristes. Los invitamos a pasar a nuestra cabeza y es un grito ahogado constante de lo que deberías haber cambiado y no has evitado. Es el impulso latente de lo que quieres y no puedes, de lo que no mantienes y pierdes, de quien está lejos, de quien no está. Y te duermes agarrando fuerte todos los problemas que te vienen de frente, esperando que la luz barra tu mente, con ganas del día siguiente... Esperando a que los monstruos se disipen y tomen forma de personas.